OpenAI está impulsando una iniciativa ambiciosa: que puedas acceder a otras aplicaciones usando tu cuenta de ChatGPT, al estilo de Google o Facebook. Pero hay un detalle que cambia todo el panorama. Según The Information, cuando uses este sistema, las apps podrían consumir el saldo de tu propia suscripción de ChatGPT.
¿Cómo funcionaría realmente este sistema?
La mecánica actual es simple: una empresa integra la API de OpenAI en su aplicación y paga por cada consulta que hacen sus usuarios. Con el nuevo modelo de "Iniciar sesión con ChatGPT", el coste se trasladaría directamente a ti.
Cuando uses tus credenciales de acceso a ChatGPT para registrarte en un servicio externo, este podría consumir los créditos o capacidad de tu plan de suscripción. La empresa se ahorra los costes de infraestructura de IA y tú gastas tu propia cuota mensual.
Es como si Netflix te permitiera ver películas en otras plataformas, pero restando de tus horas de visualización disponibles. ¿Esto está bien? Quizás para Netflix si, pero para ti lo dudo mucho.
¿Por qué OpenAI apuesta por esto ahora?
Con más de 800 millones de usuarios activos semanales, ChatGPT se ha convertido en una de las aplicaciones más populares del planeta. Y como buena empresa quiere capitalizar esta base masiva posicionándose no solo como proveedor de IA, sino como intermediario que controla el acceso y el pago de todo a lo que pueda tener acceso. El objetivo es el de siempre: datos, datos y más datos. Quién posee los datos posee el poder.
La compañía lleva meses preparando el terreno:
- En mayo de 2025 lanzó un formulario para medir el interés de los desarrolladores.
- Realizan pruebas en Codex CLI, ofreciendo entre 5 y 50 dólares en créditos API según el tipo de cuenta.
- Contactan activamente con empresas de todos los tamaños, desde startups con 1.000 usuarios hasta gigantes con más de 100 millones.
La estrategia es clara: convertir ChatGPT en una "super-app" donde tu suscripción funcione como una cartera digital para consumir IA en múltiples servicios. Sam Altman ya mencionó esta idea en 2023, cuando preguntó a los usuarios qué funcionalidades querían para 2024.
El objetivo encaja con su estrategia de ecosistema
Esta iniciativa se alinea perfectamente con los movimientos recientes de OpenAI. En el DevDay 2025 presentaron apps integradas directamente en ChatGPT como Spotify, Zillow y Canva, además de AgentKit, herramientas para construir agentes de IA.
Todo apunta a un modelo donde ChatGPT se convierte en la capa de autenticación, identidad y pago de servicios de IA. Tu cuenta sería tan esencial como tu correo electrónico o número de teléfono para navegar por internet.
Esto está lleno de riesgos, que deberíamos vigilar mucho
Centralizar el acceso a múltiples servicios en una sola cuenta amplifica exponencialmente los riesgos de seguridad. Y el historial de OpenAI no es precisamente tranquilizador:
- Febrero de 2025: Un hacker afirmó haber obtenido credenciales de 20 millones de cuentas. Aunque OpenAI negó una brecha en sus sistemas, la investigación concluyó que las credenciales provenían de malware de robo de información.
- 2023: Más de 200.000 credenciales se encontraron a la venta en la dark web.
- Marzo de 2023: Una brecha de seguridad afectó al 1,2% de los suscriptores de ChatGPT Plus, exponiendo nombres, direcciones de correo, datos de facturación y los últimos cuatro dígitos de tarjetas de crédito.
Del mismo modo que tener un buen antivirus gratis protege tu ordenador de malware y amenazas online, necesitarías confiar plenamente en la seguridad de OpenAI para proteger el acceso a todos tus servicios conectados.
Si comprometen tu cuenta de ChatGPT, podrían acceder automáticamente a todas las aplicaciones donde la uses para iniciar sesión.
La privacidad también está en juego
Según Pundrikaksh Sharma, abogado corporativo especializado en tecnología, este sistema permitiría a OpenAI "recopilar señales de uso granulares" y construir "inferencias de comportamiento sobre las habilidades o patrones de aprendizaje de los usuarios" a través de múltiples plataformas.
En otras palabras: OpenAI sabría exactamente qué aplicaciones usas, cuándo las usas, qué haces en ellas y cómo interactúas con la IA en cada una. Un nivel de vigilancia que haría que Google pareciera discreto.
¿Qué pasará si esto funciona?
OpenAI no ha anunciado fecha de lanzamiento público ni ha revelado cuántas empresas han aceptado la propuesta. Pero si tiene éxito, las implicaciones serían enormes:
- Competidores como Anthropic o Google podrían verse obligados a desarrollar sistemas similares.
- Cambiaría radicalmente cómo las empresas monetizan la IA, trasladando los costes a los usuarios finales.
- Tu suscripción de ChatGPT pasaría de ser una herramienta opcional a una necesidad para acceder a múltiples servicios.
Lo que OpenAI presenta como comodidad podría convertirse en una nueva forma de dependencia tecnológica. La pregunta no es si esto llegará, sino cuándo y cómo afectará tu privacidad, seguridad y billetera.