Miles de usuarios de Android se quejan a diario de que su batería no llega ni a mediodía. El culpable suele ser el mismo: una función que trabaja sin descanso aunque tengas el móvil en el bolsillo. Se trata del acceso constante a la ubicación, un permiso que muchas aplicaciones solicitan sin necesitarlo realmente y que está consumiendo la energía de tu teléfono a todas horas.
¿Por qué tu móvil se queda sin batería tan rápido?
La ubicación en segundo plano es una de las funciones más voraces de Android. Cuando activas "permitir siempre" en una aplicación, esta puede rastrear tu posición constantemente, incluso con la pantalla apagada o cuando no la estás utilizando.
El problema es que la mayoría de apps no necesitan saber dónde estás las 24 horas del día. Una aplicación de noticias, una red social o un juego no requieren tu ubicación en tiempo real para funcionar correctamente. Sin embargo, muchas solicitan este permiso para recopilar datos sobre tus hábitos y movimientos.
Durante el primer trimestre de 2025, se detectaron más de 180.000 nuevos malware para Android, algunos diseñados específicamente para explotar permisos como el de ubicación.
Desactiva esto ahora mismo en tu Android
Controlar qué aplicaciones pueden acceder a tu ubicación es fundamental tanto para la batería como para tu privacidad. Además de limitar este permiso, es recomendable tener instalado un antivirus gratis Android que te alerte cuando una app intente acceder a información sensible sin motivo aparente.
La buena noticia es que Android te permite gestionar estos permisos de forma individual. Desde Android 10, el sistema operativo ofrece tres opciones cuando una aplicación solicita tu ubicación:
- Permitir siempre: La app accede a tu posición en todo momento (consumo máximo).
- Solo mientras se usa la app: Acceso únicamente cuando la tienes abierta (opción recomendada).
- Denegar: La aplicación no puede acceder a tu ubicación en ningún momento.
La segunda opción es perfecta para apps como mapas o el tiempo meteorológico, que funcionan perfectamente cuando las abres pero no necesitan rastrearte el resto del día.
Pasos para limitar la ubicación en segundo plano
Configurar estos permisos es más sencillo de lo que parece. Sigue estos pasos para recuperar el control de tu batería:
- Accede a los ajustes de ubicación:
- Abre Ajustes en tu móvil.
- Busca y selecciona Ubicación o Localización.
- Entra en Permisos de aplicaciones o Permisos por aplicación.
- Revisa cada aplicación individualmente:
- Verás una lista completa de todas las apps que tienen acceso a tu ubicación.
- Toca cada una para ver su configuración actual.
- Cambia los permisos excesivos:
- Si encuentras aplicaciones con "Permitir siempre" que no lo necesitan, cámbialo inmediatamente.
- Selecciona "Solo mientras se usa la app" para la mayoría de aplicaciones.
- Para apps que definitivamente no necesitan tu ubicación, selecciona "Denegar".
- Presta especial atención a estas apps:
- Redes sociales (Facebook, Instagram, X).
- Aplicaciones de noticias.
- Juegos móviles.
- Apps de compras online.
- Herramientas de linterna o calculadoras (no necesitan ubicación bajo ningún concepto).
Los cambios se aplican de forma instantánea. No necesitas reiniciar el teléfono ni las aplicaciones afectadas.
Otros trucos para que tu batería dure más
Aunque la ubicación en segundo plano es uno de los mayores consumidores de energía, no es el único. Combina estos ajustes adicionales para maximizar la autonomía de tu móvil:
- Desactiva las notificaciones innecesarias: Cada notificación enciende la pantalla y consume batería. Revisa qué apps realmente necesitan avisarte.
- Ajusta el brillo automático: Una pantalla demasiado brillante es uno de los principales enemigos de la batería. El modo adaptativo suele ser la mejor opción.
- Limita la sincronización automática: Las apps de correo, fotos y documentos que sincronizan constantemente consumen recursos. Configúralas para que se actualicen solo cuando las abras.
- Cierra apps que no uses: Aunque Android gestiona bien la memoria, algunas aplicaciones mal optimizadas siguen trabajando en segundo plano sin motivo.
Implementar estos cambios puede aumentar la duración de tu batería entre un 20% y un 40% diariamente, según el uso que hagas del teléfono. Lo mejor de todo es que no sacrificas ninguna funcionalidad importante: las apps siguen funcionando perfectamente cuando las necesitas, pero dejan de consumir recursos cuando no las estás usando.