Hoy, 14 de octubre de 2025, Microsoft cierra oficialmente el capítulo de Windows 10. Después de diez años de servicio, el sistema operativo que aún funciona en cientos de millones de ordenadores dejará de recibir actualizaciones de seguridad, parches críticos y soporte técnico oficial.
Si todavía usas Windows 10, esta fecha marca un punto de inflexión importante. No es que tu PC vaya a dejar de funcionar mágicamente, pero las consecuencias de seguir utilizándolo sin protección adicional pueden ser graves.
¿Qué significa realmente que Windows 10 pierda el soporte?
A partir de hoy, Microsoft no lanzará más actualizaciones de seguridad para Windows 10. Esto significa que cada nueva vulnerabilidad descubierta quedará sin parchear, convirtiendo tu ordenador en un blanco cada vez más fácil para ciberdelincuentes.
Tampoco recibirás correcciones de errores, mejoras de rendimiento ni soporte técnico oficial. Si algo falla, estás solo. Además, muchas aplicaciones y servicios comenzarán gradualmente a abandonar la compatibilidad con este sistema.
La realidad puede dar auténtico miedito: seguir con Windows 10 sin protección es realmente peligroso en el año donde las ciberestafas se han intensificado debido a las IA.
Microsoft sí ofrece actualizaciones de seguridad extendidas (ESU), pero están dirigidas exclusivamente a empresas y tienen un coste considerable. Para usuarios domésticos, no es una opción viable.
Los peligros reales de quedarte sin protección en Windows 10
Usar un sistema operativo sin soporte expone tu ordenador a múltiples amenazas. Las nuevas vulnerabilidades de día cero (aquellas que se descubren pero no tienen solución) se acumularán sin remedio.
Los riesgos más inmediatos incluyen:
- Malware y ransomware: Los cibercriminales buscan activamente sistemas sin parches para distribuir virus que secuestran tus archivos o roban información sensible.
- Robo de identidad: Sin actualizaciones, tus datos personales, contraseñas y información bancaria quedan expuestos.
- Pérdida de compatibilidad: Navegadores, aplicaciones y servicios comenzarán a dejar de funcionar correctamente.
- Problemas de rendimiento: Sin optimizaciones, tu PC funcionará cada vez peor.
Muchos usuarios cometen el error de pensar "a mí no me pasará nada", pero las estadísticas son claras: los sistemas obsoletos son los primeros objetivos de los ataques masivos.
¿Puedes seguir usando Windows 10 de forma segura?
La respuesta es sí, pero necesitas tomar medidas inmediatas. Si tu ordenador no cumple los requisitos para Windows 11 o simplemente prefieres mantener Windows 10, necesitas reforzar drásticamente tu seguridad.
La solución más efectiva es invertir en un antivirus premium de máxima calidad. Aquí es donde Kaspersky Premium marca la diferencia. Este software ofrece protección multicapa que compensa la falta de actualizaciones del sistema:
- Protección en tiempo real contra malware, ransomware y amenazas de día cero.
- Firewall avanzado que bloquea conexiones sospechosas.
- Protección de identidad y datos bancarios con cifrado.
- VPN ilimitada para navegar de forma privada.
- Gestor de contraseñas para proteger tus credenciales.
- Monitorización de filtraciones de datos en la dark web.
Kaspersky Premium no solo detecta amenazas conocidas, sino que utiliza inteligencia artificial para identificar comportamientos maliciosos antes de que causen daño. En un escenario donde Microsoft ya no protege tu sistema, contar con una suite de seguridad de este nivel no es opcional, es absolutamente imprescindible.
Si tu presupuesto es limitado, existen opciones de antivirus gratis Windows 10 que pueden ofrecer una capa básica de protección, aunque con funcionalidades reducidas.

¿Es momento de dar el salto a Windows 11?
Si tu hardware lo permite, la respuesta es rotunda: sí. Windows 11 no solo recibe actualizaciones de seguridad regulares, sino que ofrece mejoras significativas en rendimiento, interfaz y funcionalidades modernas.
La migración a Windows 11 sigue siendo gratuita si tienes una licencia legítima de Windows 10. Microsoft ha confirmado que esta opción continuará disponible incluso después del fin de soporte.
Los requisitos principales para Windows 11 incluyen:
- Procesador compatible de 1 GHz o superior con al menos 2 núcleos.
- 4 GB de RAM mínimo.
- 64 GB de almacenamiento.
- TPM 2.0 (el punto más conflictivo para muchos equipos antiguos).
Si tu ordenador no cumple estos requisitos, considera si es momento de renovar tu equipo. Los precios de PCs con Windows 11 preinstalado son cada vez más accesibles, y la inversión en seguridad lo vale.
Actúa ya y no lo pospongas más
Windows 10 ha sido un sistema operativo excepcional durante una década, pero su tiempo ha llegado a su fin. Ignorar esta realidad no hará que los riesgos desaparezcan, solo los hará más probables.
Tienes dos caminos claros: actualizar a Windows 11 si es posible, o blindar tu Windows 10 con protección profesional como Kaspersky Premium. Lo que no puedes permitirte es quedarte de brazos cruzados.
La ciberseguridad no es algo que puedas dejar para mañana. Hoy es el día en que Windows 10 pierde su escudo oficial, pero no tiene por qué ser el día en que tu información quede vulnerable. La decisión es tuya.