Esta mañana me ha pasado algo que me ha recordado por qué siempre tengo un plan B para todo. Encendí mi portátil para una videollamada importante y... sorpresa: la pantalla de inicio de sesión de Windows 11 se quedó congelada. Nada. Ni contraseña, ni huella digital, ni cara bonita que valiera. Mi ordenador acababa de convertirse en un pisapapeles de 1.200€.
Y no, no es un caso aislado. Microsoft acaba de confirmar un bug bastante serio que está afectando a miles de usuarios de Windows 11. Mientras investigaba soluciones, aproveché para revisar también mi antivirus gratis windows 11 porque, seamos sinceros, cuando algo así pasa siempre nos entra la paranoia de si será un virus o no.
¿Qué está pasando exactamente? El bug explicado
El problema es más común de lo que Microsoft quiere admitir. Después de una actualización reciente (típico, ¿verdad?), muchos usuarios nos encontramos con que Windows 11 simplemente no nos deja entrar. La pantalla de inicio de sesión se queda ahí, mirándote, como diciendo "hoy no me apetece trabajar".
Técnicamente, lo que ocurre es un fallo en el servicio de autenticación de Windows. La actualización ha introducido un conflicto entre el gestor de credenciales y el sistema de inicio de sesión biométrico de Windows Hello. El resultado: quedas fuera de tu propio ordenador.
He visto fallos en mis 15 años trabajando con sistemas Windows, pero este tiene un "encanto especial" porque:
- Afecta incluso a cuentas de administrador.
- Los métodos tradicionales de recuperación fallan en muchos casos.
- Puede ocurrir en cualquier momento, no solo tras instalar la actualización.
Los síntomas que indican que tienes el bug
¿Cómo saber si tu problema es este famoso bug y no otra cosa? Estos son los síntomas que he experimentado personalmente y que coinciden con los reportados:
- La pantalla de inicio se queda congelada al introducir la contraseña.
- Windows Hello (reconocimiento facial o huella) simplemente no responde.
- Al intentar iniciar en modo seguro, el problema persiste.
- El sistema muestra un error de "credenciales incorrectas" aunque sepas perfectamente que tu contraseña es correcta.
Si te ha pasado algo parecido, respira hondo. No estás solo en esto. Mi cuñado, mi vecina y hasta mi profesora de yoga han pasado por lo mismo esta semana. Microsoft ha creado un club al que nadie quería pertenecer.
Las soluciones que realmente funcionan (probadas en mi propio ordenador)
Después de perder media mañana buscando soluciones, probé varias alternativas hasta dar con las que funcionan. Te las comparto por orden de complejidad, de menor a mayor:
Solución 1: Reinicio forzado (la vieja confiable)
A veces lo más básico es lo que funciona:
- Mantén pulsado el botón de encendido durante 10 segundos para forzar el apagado
- Espera 30 segundos (sí, cuenta hasta 30, es importante)
- Enciende de nuevo y cruza los dedos
Esta solución me funcionó en mi portátil del trabajo, pero no en mi ordenador personal. Es la más sencilla y merece la pena intentarla antes de pasar a opciones más complicadas.
Solución 2: Modo de inicio avanzado
Si el reinicio simple no funcionó, tendrás que entrar en el modo de recuperación:
- Fuerza tres reinicios seguidos mientras Windows está arrancando (sí, suena a brujería pero funciona)
- Llegarás a la pantalla de "Opciones avanzadas"
- Selecciona "Solucionar problemas" → "Opciones avanzadas" → "Símbolo del sistema"
- Escribe estos comandos (que a mí me salvaron la vida): net user tuusuario nuevacontraseña
(Reemplaza "tuusuario" con tu nombre de usuario y "nuevacontraseña" con una contraseña temporal)
Esta solución resetea tu contraseña y suele resolver el problema en la mayoría de los casos. A mí me funcionó en mi PC de sobremesa después de querer tirar el ordenador por la ventana.
Solución 3: Reparación del servicio de Windows (para valientes)
Esta es más técnica pero efectiva cuando nada más funciona:
- Entra en el símbolo del sistema como en la solución anterior
- Ejecuta estos comandos:
- sfc /scannow
- DISM /Online /Cleanup-Image /RestoreHealth
- net stop wlidsvc
- net start wlidsvc
Con esto repararás los archivos del sistema y reiniciarás el servicio de identidad de Microsoft, que suele ser el culpable principal.
Lo que Microsoft no quiere que sepas sobre este bug
Llevo siguiendo los foros oficiales desde que apareció este problema y hay algunas cosas que Microsoft no está contando claramente:
- El bug afecta principalmente a ordenadores que usan cuentas Microsoft (no tanto a cuentas locales).
- Las actualizaciones automáticas siguen instalándose aunque Microsoft sabe del problema.
- Algunos usuarios han perdido archivos al intentar soluciones drásticas como restablecer el sistema.
Mi teoría, después de analizar decenas de casos, es que el problema está en la sincronización entre la autenticación local y la autenticación en la nube. Cuando ambas no coinciden, Windows simplemente entra en pánico y te bloquea.
Prevención: cómo evitar que te pase a ti
Ya sabes que soy partidario de prevenir antes que curar. Estas son las medidas que he tomado para evitar que este problema me vuelva a afectar:
- He creado una cuenta local de administrador adicional (por si mi cuenta principal falla).
- Desactivé temporalmente las actualizaciones automáticas hasta que Microsoft solucione el problema.
- Hago copias de seguridad diarias (esto deberías hacerlo siempre, en realidad).
- Mantén a mano un USB de recuperación de Windows (te explicaré cómo hacerlo en otro artículo).
No sé tú, pero yo ya he aprendido por las malas que confiar ciegamente en que Windows funcionará siempre es como creer que nunca lloverá en tu picnic.
Lo que opino sobre la gestión de Microsoft
Vamos a ser francos: Microsoft ha gestionado este problema fatal. La comunicación ha sido mínima, las soluciones oficiales insuficientes, y la velocidad de respuesta... bueno, digamos que he visto glaciares moverse más rápido.
Lo que más me molesta es que este tipo de bugs fundamentales no deberían pasar en un sistema operativo moderno. Estamos hablando de la función más básica: dejar que el propietario acceda a su propio ordenador.
Después de este episodio, estoy seriamente planteándome probar Linux en mi ordenador personal. Mi portátil del trabajo tendrá que seguir con Windows por temas de compatibilidad, pero al menos allí tengo un departamento de IT que puede rescatarme.
Lecciones aprendidas del gran bloqueo de Windows 11
Este bug me ha enseñado varias cosas:
- Nunca confíes al 100% en ningún sistema operativo, por muy estable que parezca.
- Las copias de seguridad no son opcionales, son obligatorias.
- Siempre, siempre ten un método alternativo de acceso a tu ordenador.
- A veces, las soluciones más simples (como un reinicio forzado) son las que funcionan.
Si te has visto afectado por este problema, espero que alguna de las soluciones que he compartido te haya servido. Y si no te ha pasado aún, considera este artículo como tu plan de contingencia.
Al final, incluso los gigantes tecnológicos como Microsoft cometen errores. Lo importante es saber cómo reaccionar cuando ocurren y tener siempre un plan B. Porque, como digo siempre, en tecnología no es cuestión de si algo fallará, sino de cuándo.
¿Has experimentado este problema? ¿Encontraste alguna otra solución? Me encantaría leer tus experiencias en los comentarios.