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Ir al comparadorLa guerra contra Microsoft ha comenzado, y esta vez viene desde el corazón del software libre. LibreOffice acaba de lanzar una bomba informativa que pone en evidencia los verdaderos costes de migrar a Windows 11, y las cifras son más alarmantes de lo que imaginas.
La realidad económica que Microsoft no quiere que sepas
Cuando Microsoft anunció el fin del soporte de Windows 10 para octubre de 2025, muchos usuarios comenzaron a planificar su migración. Pero aquí viene el primer golpe: los costes reales van mucho más allá del precio de la licencia.
Según datos recientes de empresas especializadas en migración, el soporte extendido de seguridad (ESU) para Windows 10 alcanza los 183€ por dispositivo si decides aplazar la migración. Y esto es solo el comienzo.
Para quienes buscan alternativas de seguridad, es importante considerar que muchos antivirus gratis Windows 11 ofrecen protección básica, pero la verdadera seguridad viene de un sistema operativo que no dependa de parches constantes ni actualizaciones forzosas.
El proyecto "End of 10": Una respuesta coordinada
The Document Foundation no está sola en esta batalla. El proyecto "End of 10" ha congregado a gigantes del código abierto como KDE y ahora LibreOffice, todos unidos bajo una premisa devastadora: tu equipo no está obsoleto, solo quieren venderte uno nuevo.
Esta iniciativa ha puesto sobre la mesa argumentos que van más allá de lo económico:
- Impacto ambiental: Millones de PCs perfectamente funcionales terminarán en vertederos
- Extorsión tecnológica: Forzar actualizaciones innecesarias cada pocos años
- Control del usuario: Pérdida progresiva de autonomía sobre nuestros propios dispositivos
Los requisitos fantasma de Windows 11
Después de analizar en profundidad los requisitos de Windows 11, me he dado cuenta de algo preocupante: las barreras técnicas parecen más comerciales que tecnológicas.
TPM 2.0: El guardián invisible
El chip TPM 2.0 se ha convertido en el principal obstáculo para la migración. Teóricamente diseñado para seguridad avanzada, en la práctica funciona como un filtro que deja fuera equipos de menos de 5 años. ¿Coincidencia? Difícilmente.
Secure Boot: Protección o restricción
Aunque Microsoft promociona Secure Boot como una característica de seguridad esencial, la realidad es que muchos sistemas funcionan perfectamente sin él. Su implementación obligatoria parece más un mecanismo de control que una necesidad técnica real.
Linux + LibreOffice: La alternativa que funciona
Lo que más me ha sorprendido durante mi investigación es descubrir que la alternativa no solo existe, sino que es superior en muchos aspectos.
Ventajas económicas inmediatas
- Coste cero en licencias de sistema operativo.
- Sin cuotas de suscripción mensuales o anuales.
- Reutilización de hardware existente.
- Soporte gratuito de la comunidad global.
Libertad técnica real
LibreOffice junto con distribuciones Linux modernas ofrecen algo que Windows 11 no puede garantizar: control total sobre tu sistema. Sin actualizaciones forzosas, sin telemetría oculta, sin dependencia de servicios en la nube.
Casos de éxito que demuestran viabilidad
Point-after-point, las organizaciones que han migrado a Linux + LibreOffice reportan resultados sorprendentes:
- Administraciones públicas europeas han ahorrado millones en licencias mientras mejoran su independencia tecnológica. Empresas de todos los tamaños descubren que la productividad no solo se mantiene, sino que a menudo mejora.
- El argumento de la "dificultad de migración" se desmorona cuando observas que ciudades enteras, universidades y corporaciones ya han completado la transición exitosamente.
La decisión que define el futuro digital
Microsoft está jugando una partida arriesgada al forzar esta migración. Por primera vez en décadas, millones de usuarios se ven obligados a replantear su relación con Windows, y las alternativas nunca han estado más maduras ni más accesibles.
¿El verdadero coste de Windows 11? No son solo los euros de la licencia o el hardware nuevo. Es la renuncia progresiva al control sobre nuestros propios dispositivos, nuestros datos y nuestras decisiones tecnológicas.
2025 no marca el fin de Windows 10, marca el inicio de una nueva era donde usuarios informados pueden elegir libertad por encima de dependencia. La tecnología debe servir a las personas, no convertirlas en rehenes de estrategias comerciales.
