Apple acaba de lanzar macOS 26.1 para todos los Mac compatibles con la versión 26.0, y aunque los iPhone suelen llevarse toda la atención mediática, esta actualización trae cambios significativos que merecen tu atención. Desde mejoras visuales hasta correcciones críticas de seguridad, esta versión demuestra por qué mantener tu sistema actualizado es fundamental.
¿Cómo actualizar tu Mac a la nueva versión?
El proceso es sencillo y sigue los pasos habituales de siempre. Dirígete a:
- Ajustes del Sistema > General > Actualización de software y deja que el sistema haga su magia.
Importante: incluso si instalaste la versión RC con un perfil beta, necesitarás actualizar porque se trata de una compilación diferente.
La compatibilidad se mantiene idéntica a macOS 26, así que si tu ordenador ya corría la versión anterior, no tendrás problemas con esta actualización.
¿Qué trae de nuevo Liquid Glass?
Una de las quejas más recurrentes sobre Liquid Glass ha sido su excesiva transparencia, que en algunos casos dificultaba la legibilidad. Apple ha escuchado y ahora ofrece dos estilos de interfaz: el traslúcido original y un nuevo modo tintado.
El modo tintado reduce las transparencias y añade un ligero tinte blanco o negro (dependiendo de si usas el tema claro u oscuro) para mejorar la visibilidad de los elementos.
Lo configuras en:
- Ajustes del Sistema > Aspecto > Liquid Glass.
Una mejora simple pero efectiva que demuestra que Apple está puliendo su polémica interfaz.

FaceTime funcionará mejor aunque tu internet sea malísimo
Las videollamadas son parte fundamental del trabajo y la vida personal, pero hasta ahora FaceTime sufría cuando la conexión a internet no era óptima. Esta actualización mejora considerablemente la calidad del audio en condiciones de bajo ancho de banda.
Tanto tú como tus interlocutores notaréis la diferencia: conversaciones más fluidas y menos cortes frustrantes cuando la WiFi decide ponerse caprichosa.
Apple Music se vuelve más profesional con AirPlay
La función AutoMix de Apple Music, que añade fundidos entre canciones simulando un DJ profesional, ya funciona correctamente cuando envías música mediante AirPlay. Antes esta característica se desactivaba al reproducir en altavoces externos, televisores o cualquier dispositivo compatible, pero ahora el procesamiento se ejecuta desde tu Mac manteniendo la experiencia completa.
90 parches de seguridad que no puedes ignorar
Más allá de las mejoras visuales y funcionales, lo realmente crítico de esta actualización son sus 90 correcciones de seguridad. Sí, has leído bien: noventa vulnerabilidades corregidas.
Entre los fallos solucionados encontramos desde apps maliciosas capaces de acceder a datos privados hasta código que podía ejecutarse con privilegios elevados. Especialmente preocupantes eran las vulnerabilidades en WebKit que permitían ataques simplemente visitando una página web. Por eso es crucial tener un buen antivirus para Mac (si, incluso en el ecosistema Apple es beneficioso tener un antivirus externo) y mantener el sistema operativo actualizado.
Apple también ha reforzado el control parental añadiendo un filtro de seguridad más robusto para impedir que las cuentas infantiles accedan a contenido inapropiado en la web.
Pequeños detalles que mejoran la experiencia
Apple ha renovado los iconos de la aplicación Apple TV tras su rebranding, dándoles un aspecto más colorido y moderno. También el icono del disco interno Macintosh HD ha sido rediseñado eliminando los puertos que mostraba en versiones anteriores, un cambio sutil pero que moderniza la estética general.
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¿Vale la pena actualizar ahora mismo?
La respuesta es un rotundo sí. Las 90 correcciones de seguridad por sí solas justifican la actualización inmediata. Pero además, las mejoras en Liquid Glass, FaceTime y Apple Music convierten esta versión en una de esas actualizaciones completas que mejoran tanto la seguridad como la experiencia de uso diaria.
No esperes más: tu Mac te lo agradecerá y tú notarás la diferencia en el día a día.